lunes, 22 de febrero de 2021

Reseña: S.E.D.A (Sucesos extraños de Argentina) – La liga literaria




Sinopsis:

La Liga Literaria se presenta con S.E.D.A., una antología que recopila relatos de sucesos extraños ocurridos en territorio argentino. En esta primera aventura, nos invitan a convertirnos en nuevos integrantes de La Liga, mientras exploramos los lugares más impensados del país.
Las voces narradoras de cada historia tiñen los inhóspitos recovecos donde se han experimentado extraordinarios sucesos, dignos de ser compartidos. Una obra de intriga y fantasía, en la que el vértigo y los escalofríos recorrerán nuestra espina dorsal ante pasajes de suspenso donde habita lo paranormal.
En esta ópera prima de La Liga que llegó para quedarse entre la gente, a instalarse en bibliotecas junto a un sinfín de historias que los ojos lectores no podrán pasar por alto.

Opinión Personal

Quiero agradecer profundamente a @lisandro.n.c.urquiza por el ejemplar y la gran confianza con la que pone siempre en mis manos sus obras.

Esta interesante antología se compone de quince relatos, “la liga literaria” es un grupo integrado por once autores independientes, conocía la obra de algunos de ellos y a otros los leí en esta oportunidad por primera vez. La mayor riqueza de este libro es su gran variedad de estilos, es hermoso que se hayan reunido diferentes voces para generar una obra de gran calidad con un hilo conductor bastante sólido.

Me atraen mucho los misterios, las historias y leyendas que nuestro país conserva en sus rincones, a algunas ya las conocía, otras me sorprendieron, y en algún momento recordé alguna de mis experiencias con lo paranormal. Un detalle que quiero destacar es la acertada decisión de adjuntar al final de algunos relatos Códigos QR, que llevan directo a videos relacionados con el tema del relato en cuestión;  además de ser un complemento informativo, en algún momento llegaron a provocarme alguna pesadilla o dificultad para dormir.

El prólogo desde sus primeras líneas se nota que está escrito por Lisan, es hermoso poder identificar el estilo tan rápido, y pienso que cuando el lector logra hacerlo con tanta rapidez y certeza es porque quien escribe tiene un sello propio; este es un ejercicio que me encanta poner en práctica tanto con la literatura como con la música en el caso de las bandas sonoras de películas. Lograr un estilo único no es fácil, es algo que merece un gran reconocimiento. Lo mismo sentí en el momento de leer el relato de Lisan, que me deja personajes de los que necesito saber más.

Otro autor que ya conocía es Cristian, me encanto ver referencias a personajes de su bilogía “Percepción alterada”, de esta forma se amplía el universo de sus personajes y me quedan ganas de seguir leyendo más sobre ellos en el futuro.

Una de las propuestas de este libro es mantener la identidad del autor en secreto, sólo al final en el apartado “Ficha de autores” se revela el autor de cada relato, como no soy muy amiga de las adivinanzas tengo que admitir que no espere terminar la lectura para consultar en la ficha a quien correspondía cada historia. Me encantaron estas fichas con una pequeña autobiografía de cada uno, es lindo poder conocer un poco a la persona detrás de la obra.

Todos los relatos me gustaron muchísimo, me quedo con una gran necesidad de seguir leyendo la obra de los autores que descubrí gracias a esta lectura. No todo es misterio y miedo, las historias están cargadas de diferentes emociones e invitaciones a la reflexión sobre muchos aspectos que nos hacen humanos, seres imperfectos siempre en la búsqueda de evolucionar.

Mención especial: el relato “El banquito” es muy interesante porque toma a un personaje que casi todos conocemos y que nunca nos podríamos cansar de ver, sin duda “El inimputable” no dejará de ser leyenda para nosotros.

Espero ansiosa una próxima publicación de La liga literaria, esta antología es una prueba más de que la escena literaria independiente argentina tiene producciones de gran calidad que ofrecer. No duden darle una oportunidad.


Calificación: ★★★★★

Frases destacadas:

“Los humanos no cambiamos tanto con el tiempo, pero este tipo de historias contadas por bocas de otras personas quizás sí, y esto es porque nos gusta creer en lo bueno, en lo malo, dudar y dejar abiertas posibilidades, sorprendernos e imaginar.”

“¿Acaso no le ha pasado a muchos de perder a alguien, superarlo y aprender a convivir con la pérdida? Pero luego, el tiempo hace que no recordemos bien su rostro, su olor, su voz y entonces empezamos a hacer un mapa de lo que recordamos, así lo guardamos en el corazón. Y no podemos revertir nada. Quedándonos con el deseo de volver a ver a alguien que se nos fue, pero es solo un deseo.”

“Solo quien está reconciliado con el dolor y la pérdida puede entender a otros que necesitan un abrazo, un oído o simplemente la paz de compartir un poquito de solo o de luna.”

“Es difícil creer que alguien va a prestarte atención, y cuando eso se concreta, nos queremos asir a esa persona como si fuera la cura. Pero si existía una cura, estaba dentro de mí y en nadie más.”

“Vino a mí la misma pregunta que me hacía en cada viaje: ¿por qué no hago esto más seguido? Es que la rutina es un guía implacable. Podía transitar el camino habitual con los ojos cerrados; conocía bien qué baldosas estaban flojas y cuáles eran seguras de pisar. Porque hay que llegar al trabajo con los zapatos bien lustrados, la camisa planchada y el cabello prolijo, aunque tengamos el alma como un trapo de piso, reseco y sucio en un rincón.”

“Me di cuenta de que a veces el closet nos lo creamos nosotros mismos.”

“No se molesta a los vivos, mucho menos a los muertos.”

“Creo que las cosas no son malas o buenas, solo que pueden resultar peligrosas. No somos malas personas, somos humanos. Y los humanos son peligrosos.”

“¿Cuál es el límite de la acción cuando te encontrás en un ambiente de pánico? Nadie puede en realidad prever con tanta frialdad la conducta que llevaría a cabo en circunstancias extraordinarias.”

“¿Qué sentimiento rompe más el alma? ¿El desequilibrio del miedo o el dolor de la desilusión?”

“En la cotidianidad se juzga minuto a minuto, y con una reflexión que dura segundos, como si el criterio estuviera preestablecido, incorporado y sin zonas grises.”

“Se sabe que no es fácil, no es nada fácil estar vivo. Mucho menos muerto. Una vez allí, las posibilidades son nulas y era eso quizás lo más aterrador.”


No hay comentarios:

Publicar un comentario